miércoles, 30 de noviembre de 2011

y Rajoy dijo adios desde el balcón

Tras el 20N el PP se ha quedado mudo. Rajoy lleva más de una semana escondido, atenazado por el miedo y acosado por sus propias mentiras durante la campaña electoral. Ya no tiene nadie a quien culpar y ahora es él quien debe dar respuestas, pero ya ha pasado más de una semana y todavía no ha sido capaz de poner encima de la mesa una sola medida para los ciudadanos de este país, todavía no les ha dado ni una sola señal que pueda tranquilizarlos.

Rajoy los ha abandonado, se ha olvidado de ellos y de las promesas que hizo durante la campaña, después de haberse apoyado en su desesperación para asomarse al balcón de la victoria. Fue sólo eso, un vergonzoso andamio que inmediatamente se ha venido abajo. El pasado 20 de noviembre, desde el balcón, Rajoy dijo adiós a todos sus compromisos con los ciudadanos.

Porque Rajoy ha ganado con una campaña basada en el cinismo y en la crueldad. Prometió que iba resolver instantáneamente los problemas de la economía, que iba a crear millones de empleos de forma inmediata, pero una vez alcanzado el poder ¿Dónde está la preocupación de la derecha ahora por el millón doscientos mil desempleados de Andalucía?, ¿Ya no cuentan?, ¿Ya no existen?

Rajoy los ha borrado de su horizonte político. El PP los ha borrado igual que ya hizo, con la complicidad de Arenas, cuando no incluyó a 400.000 andaluces en el censo para que no llegaran los 2.500 millones de euros de la financiación autonómica que le correspondían a Andalucía. Han vuelto a ningunear a los andaluces, como ocurrió con la Deuda Histórica, negando su existencia cuando el propio Arenas era secretario general y ministro.

Desgraciadamente, no es algo nuevo. Pero a los socialistas nos sigue sorprendiendo el desprecio a esta tierra por parte de la derecha y la ruindad de un partido político que no ha hecho otra cosa más que maltratar a Andalucía durante décadas. Nos duele, nos duele que de una manera tan descarada se utilicen, se traicionen y se tumben las expectativas de los andaluces y andaluzas.

El PP andaluz lo demostró en el último pleno del Parlamento. Se debatía una iniciativa para dotar económicamente un Plan de Empleo para el sector de la construcción en Andalucía y la bancada de Arenas hizo como Rajoy, se escondió.

Tan poco les importa la situación de los desempleados andaluces que ni siquiera movieron un dedo para pulsar el botón de votaciones, ni siquiera para cumplir con su obligación como representantes del pueblo, para decir si están de acuerdo o no con poner en marcha un programa con recursos suficientes para paliar el desempleo en uno de los sectores más afectados por la crisis en esta comunidad autónoma. No movieron ni un dedo, ni lo van a mover.

Pero los andaluces y andaluzas no están solos. Los socialistas vamos a seguir trabajando para sacar adelante a esta tierra, para impulsar la actividad económica, para estar al lado de los autónomos, de los pequeños y medianos empresarios, al lado de los desempleados de esta comunidad autónoma.

Con lo que ha ocurrido esta semana, el PP ha dejado muy claro que le importan muy poco los ciudadanos y mucho el poder. Lo dejó claro Rajoy, cuando dijo adiós desde el balcón.

No hay comentarios: