Arenas, el eterno demandante

En principio, podría parecer simple torpeza intelectual del PP, pero no es el caso. No puede darse el malentendido cuando el que escucha no quiere entender, sino polemizar, confundir y manipular. Y eso es lo que ha intentado hacer esta semana el PP de Arenas, tergiversando las palabras de nuestro presidente, José Antonio Griñán, sobre la reforma del Servicio Andaluz de Empleo.

La idea no era nueva, y el planteamiento fue más que claro, nítido. Pepe Griñán insistía en la necesidad de un nuevo diseño de los servicios públicos de empleo para reforzar su capacidad de intermediación en el mercado laboral. Defendía su apuesta por la formación para reforzar la empleabilidad de las personas en situación de desempleo, para pasar del concepto pasivo de “demandante de empleo”, hacia un nuevo perfil más activo y cualificado de “oferente de empleo”. No hay juego de palabras, no hay retórica, sino una nueva definición de las políticas de empleo en nuestra comunidad y la búsqueda de una solución a la compleja situación que estamos viviendo.

Sin alternativa alguna, la respuesta del PP a esta propuesta fue la de siempre, el desprecio y la burla. Porque Arenas huye del debate productivo e inteligente y recurre a la puñalada trapera. Así va hilvanando su programa electoral de cara a las próximas elecciones. Todas… son puntadas sin hilo. Porque Arenas no ha puesto sobre la mesa ninguna idea, ni siquiera una mala idea, para contribuir a la recuperación económica de Andalucía.

Lo hemos visto esta semana en el Parlamento de Andalucía, donde ha vuelto a ser la voz de la frivolidad y la irresponsabilidad. Se analizaba la incidencia de los Presupuestos Generales del Estado de 2011 en Andalucía, pero Arenas se equivocó con los apuntes, y su retahila de críticas sin fundamento resultó bochornosa. Ninguna propuesta concreta, sólo ataques al gobierno, demostrando que lo que le interesa... no son los presupuestos generales... sino las elecciones generales.

Arenas, el mismo que cuenta parados como votos para su partido, va camino de su quinta derrota electoral, porque no tiene ni la capacidad, ni el conocimiento, ni la más mínima voluntad de trabajar por Andalucía… por eso seguirá siendo el eterno demandante, ansioso de poder, incapaz de ofrecer nada a los andaluces y andaluzas.